domingo, 7 de septiembre de 2014

Hoteles low cost por 20 euros la habitación - Pagar por lo que se usa

Pagar 20 euros por pasar una noche en un hotel es posible. La idea es no pagar por lo que no se utiliza, en vez de pagar 100 euros por una noche en un hotel de cuatro estrellas. Los hay más baratos, también, pero también es verdad que muchos de los servicios que se prestan y que se cobran aunque no se usen no son necesarios ni requeridos por el cliente. Empieza a pensar si requieres de climatización, televisión por satélite, canales de pago, minibar, teléfono, carta de almohadas, cambio de toallas y sábanas, limpieza, amenities en el cuarto de baño, albornoz, zapatillas… Mucha gente no utiliza nada de eso, o no lo utilizaría si se lo cobraran aparte, ¿por qué pagarlo entonces? Si no se nos incluyese el cambio de toallas, hacer la cama, amenities, limpieza, mini-bar, ventanas… ¿cuánto nos costaría un hotel low cost?


Una encuesta de la empresa hotelera Jetcost ha preguntado a los clientes de qué prescendirían en sus estancias en un hotel para abaratar el precio. Estos han sido los resultados, en orden de preferencia:

• Cambiar las toallas cada día
• Hacer la cama a diario y cambiar sábanas
• Amenities en el cuarto de baño
• Limpieza diaria de la habitación
• Televisor, mini bar, wi-fi
• Servicio de habitaciones: comidas, despertador…
• Otros servicios del hotel: conserjería, gimnasio, spa, salones…
• Aire acondicionado y calefacción
• Ventanas…

Habitación doble por 20 euros

La idea final es que la tarifa básica de la habitación doble sea de 20 euros e incluso algo menos si se hace la reserva con suficiente antelación. Es una habitación para dormir y también tiene un cuarto de baño para darse una ducha. Y a partir de entonces se empezarían a incluir los extras:

->si se usa el aire acondicionado se paga aparte,
->si se enciende la televisión también,
->si se cambian las sábanas o se hace la cama tiene un coste extra,
->igual que si se cambian las toallas o se necesita champú.
->cualquier otro servicio, como el uso del gimnasio, o el minibar, el desayuno o incluso el conserje incrementa la factura.
Se paga por lo que se utiliza, pero si se quieren pocos lujos, la tarifa por noche sale muy económica.

Y es que la adaptación de los hoteles al modelo low cost es la última revolución que falta en el engranaje de los viajes. Ya se han acomodado a él las compañías aéreas, incluso las convencionales, el alquiler de coches, los cruceros, algunos turoperadores… Sin embargo pasar una noche en un hotel desequilibra un presupuesto low costo puesto que no parece lógico hacer un vuelo de dos horas y media por 15 euros y pagar 120 por unas pocas horas en un hotel.

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